Por lo tanto, son máquinas de elevación con una amplia variedad de aplicaciones en el mundo de la construcción y permiten, por ejemplo, el desplazamiento de bolsas de cemento y áridos para fabricar hormigón en una pequeña amasadora, el desplazamiento de ladrillos para la construcción de cerramientos, el movimiento de pequeña maquinaria dentro de la obra, etcétera.
El cuerpo se conforma por el polipasto propiamente dicho, accionado con mando y dotado de un motor eléctrico, una polea y un soporte para el conjunto. Este último puede ser de dos tipos: en brazo giratorio de estructura tubular sobre poste y en cabestrante con raíl deslizante.
Proceso de instalación de un polipasto
En función del tipo de estructura de soporte que tengan, los polipastos de dividen en diferentes categorías.
En el caso de los polipastos con brazo giratorio de estructura tubular sobre poste, el desplazamiento en horizontal se realiza mediante ese mismo brazo oscilante que gira con el eje coincidente con el poste vertical. El procedimiento para la instalación resulta sencillo. En un primer lugar basta con montar el tubo vertical que dará soporte a la estructura del polipasto y que le sirve de eje de giro.
Dicho tubo vertical va arriostrado verticalmente mediante dos tubos de menor diámetro, que se encuentran en el suelo unidos a otros dos tubos horizontales, también conectados a la base del poste vertical y lastrados en su parte final. En la parte alta del tubo vertical existen dos puntos de apoyo, en los que se insertará la viga horizontal que soporta el polipasto, así como otro arriostramiento vertical, que limita las flechas del polipasto cuando es accionado para el levantamiento de cargas.
Los polipastos montados sobre cabrestante con raíl deslizante están formados por una estructura metálica que da soporte a una viga carril sobre la que se desliza el polipasto. El montaje de este polipasto se realiza disponiendo dos pórticos tubulares dobles que se sueldan a una base metálica cuadrada.
Los pórticos tubulares serán empresillados, es decir, habrá elementos de unión entre los dos tubos metálicos. Para rigidizar el conjunto de los dos pórticos, se realizarán arriostramientos verticales en forma de cruz de San Andrés mediante elementos metálicos planos.
De uno de los citados pórticos metálicos partirá una jácena a media altura que proporcionará que el soporte de la viga carril permita al polipasto una excentricidad con respecto a la base cuadrada y, por lo tanto, se podrá acceder así a las cargas de forma más cómoda.Finalmente se instalará la viga carril, anclada a la parte superior de los pórticos metálicos y apoyada en la jácena.
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